Chacarita 1970-1980

UN COMIENZO DE LUJO


El comienzo de la década del 70 era más que auspicioso. El equipo era campeón metropolitano y además le había renovado contrato a Víctor Rodríguez e incorporó a grandes figuras del ámbito local. La más resonante fue la de el arquero Daniel Carnevalli, proveniente de Atlanta, por la que “Chaca” pagó 14 millones de pesos, de ese entonces.

En los amistosos de pretemporada el equipo venía bien encaminado, ya que en los partidos jugados frente a Ferro y Atlanta, los dos resultaron victoria “Funebrera”.

El 22 de marzo comenzó el metropolitano nada más ni nada menos que en la mismísima Bombonera, en donde los “Xeneizes” ganaron por 2 a 0. En la segunda y tercera fecha también se cosecharía una derrota, frente a Vélez y Argentinos por idéntico resultado: 3 a 1.

Después de esas tres derrotas consecutivas, no se podía aspirar a bicampeonato porque se jugaba una sola ronda, pero sí estaba la chance de quedar entre los 12 primeros para poder entrar al nacional. Como no podía ser de otra manera, Chacarita finalizó el metropolitano en la 13ª ubicación y a un sólo punto de Central, que era el último clasificado. Pero nada estaba dicho, porque la AFA le permitía a los equipos del 13ª al 16ª jugar un cuadrangular para que clasifiquen dos equipos más. Lo negativo era que los dos equipos que no ingresaran al Nacional y salieran últimos en dicho certamen, entrarían directamente al reclasificatorio, en donde se podía perder la categoría.

Chacarita, Huracán, Quilmes y Estudiantes eran los 4 clasificados. Los dos primeros encuentros, frente al “Cervecero” y al “Pincha” multicampeón de Vladislao Cap, resultaron empate. En la plata el “Tricolor” se trajo un empate en uno, y en San Martín se igualó sin tantos frente al equipo quilmeño. El último cotejo frente al “Globo” se jugó en San Martín, y como no podía ser de otra manera, se sufrió hasta el minuto 90. En un partido parejo el gran Ángel Marcos había logrado quebrar el 0 y poner a “Chaca” en ventaja, pero rápidamente el jugador de Huracán Giribert, puso el partido en tablas. Recién a los 44 minutos del segundo tiempo, Puntorero definió el duelo con un 2 a 1 final.

Chacarita entró por la ventana al Nacional, ya que tenía los mismos puntos que Estudiantes y Quilmes, pero por tener un gol más que este último, clasificó junto con Estudiantes de la Plata.

En el nacional Chacarita disputó la Zona A, donde estaba Racing, San Lorenzo y River, entre otros. En la cuarta fecha de ese torneo llegó la recuperación definitiva, cuando se derrotó a Atlanta por 1 a 0 en Villa Crespo, con gol de Frassoldati. A partir de esos 3 puntos el equipo logro victorias ante San Lorenzo y River, puntero del torneo, y un empate ante Racing. Cuando comenzó la segunda rueda, el equipo de San Martín consiguió 6 victorias consecutivas, que nos catapultaría a la cima, como único líder. Pero al visitar a San Lorenzo en el antiguo estadio de Avenida La Plata, el equipo cayó derrotado sin atenuantes por 3 a 0, y esto le permitió al escolta, River, llegar a la punta nuevamente luego de obtener un punto frente a Newell´s en Rosario. A partir de ese entonces los dos peleaban la punta, hasta que se cruzaron en la 29ª fecha en el Antonio Vespucio Liberti. Con un estadio repleto de “gallinas” y también con bastante público “Funebrero”, la grandeza y coraje de ese equipo llevo al inobjetable triunfo por 2 tantos contra 1 que nos devolvía a la punta del campeonato y descartaba a River como nuevo campeón. Una fecha después, en un empate 4 a 4 frente a Talleres en San Martín, el equipo se aseguró la clasificación a las semifinales del campeonato.

El 20 de diciembre se disputó, en el estadio de Racing, tan conocido por todos, el choque frente a Boca. Era estadio neutral y un solo partido. La otra semifinal era Central y River. El “Funebrero” no pudo con el equipo de la Ribera y cayo por 3 a 2, quedando así eliminado, por quién terminaría siendo el campeón de ese torneo.

1971 sería un año inolvidable para todos los chacaritenses. A principio de año se incorporaron Rodolfo Fucceneco, Raúl Forteis, Néstor Sinatra y Omar Wehbe, todos ellos, libres.

La primera fecha del metro fue contra Boca, y otra vez la victoria fue para los “Bosteros” por 3 a 2. Una semana después se logró un empate frente a Racing por 2 a 2. De la tercera a la octava fecha, Chacarita sólo conoció la victoria y era otra vez el candidato de todos. Los medios, la gente y los propios simpatizantes “Tricolores” ya hablaban de la perfección y del lujo que era ver a este Chacarita, y ya era común escuchar en la calle la comparación con el campeón del 69. Con el correr de las fechas el “Tricolor” y River volvían a disputarse la punta del torneo. Hasta que llegó el gran duelo en el Monumental, donde Chacarita, demostraba una vez más porqué se adjudicaría el sexto lugar entre los equipos más grandes de La Argentina. El 21 de abril, con un Marcos “Maradoneano” Chacarita se llevó un 2 a 0 con baile del estadio de River, para quedar nuevamente en la cima. La revista partidaria de los “Millonarios” había publicado en su tapa ¡¡¡No se les puede ganar!!! Con una foto de Ángel Marcos en la tapa. Y otra vez éramos candidatos al campeonato. El puntero del campeonato visitaba a Argentinos Juniors en la 16ª fecha, y se llevaba una derrota por 2 a 0.

A mediados de la segunda ronda, inconscientemente, regaló el campeonato. Varios dirigentes del Nantes llegaron a la Argentina con el solo objetivo de llevarse al mejor jugador del país y estrella de la selección nacional, Ángel Marcos. El 25 de junio de 1971, y justamente frente a Atlanta, Marcos jugó su último encuentro en Chacarita y fue transferido al club francés en 45 mil dólares. A partir de ahí el “Funebrero” ganó solo 3 de 13 partidos y dejó servido el campeonato a Vélez e Independiente, quién fue finalmente el campeón.


La copa Joan Gamper :

El 22 de agosto de 1971, y con Marcos en el equipo, por una cláusula en el contrato, toda la delegación “Tricolor” partió hacia España, más precisamente Barcelona, a disputar la Copa Joan Gamper, un trofeo que se juega todos los años en la pretemporada del “BarÇa” y a la que se invitan los mejores equipos del mundo. Esos equipos eran, además del local, Chacarita, el Bayern Munich (con la base de la Alemania campeón del mundo en 1974) y el Honved.

Se jugarían las semifinales, que se definió por sorteo. “Chaca” tenía que enfrentarse nada menos que con el gran Bayern Munich, multicampeón alemán. El 24 de agosto se llevó a cabo ese cotejo en el Camp Nou. Fue realmente un verdadero baile, una humillación al gran equipo europeo, por eso a los 16 minutos de la etapa inicial, quién otro sino Ángel Marcos, puso el 1 a 0 parcial. El dominio de los argentinos se fue acrecentando con el correr de los minutos. Mucho más, cuando a los 20 minutos del complemento Zobel se fue expulsado tras una tremenda infracción a Forteis. Claro, con semejante baile que le estaba propinando el equipo “sudaca”, humilde e ignorante, para su consideración, bastante chata por cierto, les era complicado verse tan superados. Dos minutos pasaron hasta que el palo le dijo no a los alemanes, luego de un terrible remate Roth. A partir de ahí y con un hombre más Chacarita se fue al ataque y a 60 segundos del final, con un centro perfecto de Marcos, Fucceneco clavo un gran cabezazo que liquidó el pleito.

Chacarita era tapa de todos los diarios del planeta y estaba en boca de todos. El Barcelona había eliminado al Honved y se prepara a jugar la final frente a la gran sorpresa argentina. Un día después, el 25, se disputó la final. El árbitro del partido, el catalán Pablo Sánchez Ibáñez, fue tan decisivo en el resultado, obviando infracciones y penales para los visitantes, que en el segundo tiempo, luego de un clarísimo penal a García Cambón, que el referí obvió, la propia parcialidad del Barcelona lo abucheó. La cuestión es que el local logró un ajustado 1 a 0, robado a más no poder mediante el árbitro. Pero poco importaba ya, porque Chacarita demostró estar al nivel de los grandes equipos del mundo, más allá de los resultados.


El fin de una etapa gloriosa:

Entre los años 1972 y 1973, el equipo comenzó a decaer, finalizaba cada vez más abajo en los respectivos campeonatos que disputaba. En 1974 finalizó último en la zona B del campeonato metropolitano, y ya estaba asumido que la mejor etapa de nuestra historia había quedado atrás. Además Petrocelli, Frassoldati y Recúpero, los únicos tres campeones del 69´ que quedaban en el club, dejaron el mismo. En 1975 hubo una renovación total del plantel, porque además de los chicos del club que debutaron (Marangoni entre otros) se habían incorporado más de 10 jugadores. El arquero Miguel Onzari, los defensores Miguel Ángel Bordón y Pablo Zucarini y el mediocampista Horacio Bianchini.

En ese metro de 1975 se obtuvo la 15ª posición y el equipo comenzaba a verse comprometido con la pérdida de categoría.

En 1976 llegaron más jugadores, entre ellos, Carlos Horacio Salinas y el arquero Pedro Vivalda, ambos de River. Un nuevo técnico se hacía cargo del equipo, un tal Alfio Basile. Ese equipo también naufragaría por la mitad de tabla pero con algunos logros inolvidables. Por ejemplo la victoria obtenida frente al River de Filliol, Perfumo, Alonso, J.J.Lopez y Más, que era dirigido por el gran Ángel Labruna. El triunfo fue para “Chaca” por 2 a 1 y la grata sorpresa fue para todos los “Funebreros” presentes en el estadio. Sin embargo, al finalizar el torneo el “Tricolor” quedaba noveno en la zona B. Debido a esa posición tuvo que jugar un repechaje por el descenso con los otros 9 equipos de más bajo rendimiento en el año. Finalizado este mini torneo, San Telmo sufrió el descenso, y concretó su único año en primera en toda su historia.

En 1977 se jugó el torneo más largo de la historia del fútbol argentino, en donde participaron 23 equipos y se disputaron 44 fechas. Chacarita contrató al inolvidable Hugo Pena, papá de Sebastián, de River, Roque Avallay, procedente de Atlanta y Claudio Casares. El equipo finalizó con mucho más aire que años anteriores y su continuidad en la máxima categoría del fútbol argentino no corría peligro, pero tampoco alcanzaba para pelear algún título. “Chaca” obtuvo 40 y finalizó en la 16ª posición. Lo más importante fue el rendimiento de Avallay que convirtió 22 goles en los 44 partidos y fue automáticamente cedido a Racing. Para el nacional, ya sin Avallay, Chacarita finalizó en 7ª posición entre 8 equipos.

Ya en 1979 se produciría uno de los hechos más dolorosos de nuestra historia, el descenso a la B. Luego de una escasa producción en el Nacional, el “Funebrero” terminó último en la zona B, junto con Atlanta, y deberían jugar un cuadrangular con los dos últimos de la zona A, que fueron Gimnasia y Esgrima La Plata y Platense. De esos 4 equipos solo 1 mantendría la permanencia en la división. Ese cuadrangular de “La Muerte” como lo habían denominado se comenzó el 22 de julio de ese año, y el conjunto de San Martín logró un inobjetable 2 a 0. En la segunda fecha, en La Plata, el conjunto local derrotó al “Tricolor” por 3 a 2 en el último minuto de juego y luego de Chacarita había empatado el juego mediante un tanto de Pena a los 40´ del segundo tiempo. Una semana más tarde y en Vicente López, Platense se llevó un 2 a 1 en su favor, y “Chaca” quedó al borde del descenso. Pero 7 días más tarde se obtuvo una goleada en Villa Crespo frente a Atlanta y ahora estaba la chance de definir ante el “Lobo” y el “Calamar” en San Martín. Frente al equipo de la capital provincial se terminó todo, porque Chacarita perdió 2 a 1 y luego de la victoria de Platense frente a Atlanta, todo estaba definido, “Chaca” se iba al descenso después de 20 años de permanencia y de grandes campañas. El último duelo fue otra derrota para los de San Martín, derrota que le propinó Platense por 2 a 1, quién finalmente mantuvo la categoría. Lamentablemente, lo peor estaba por venir.